No es muy fácil alcanzar esta pizzería, situada entre los callejones del casco histórico del pueblo. Tampoco es fácil encontrar un lugar donde aparcar en la plaza frente al local. ¿Por qué? La razón son las pizzas de Fabrizio Pasinelli, dueño de la pizzería con su mujer Mariangela y su hermano Marcello. Estas pizzas se elaboran utilizando harinas de alta calidad después de largas o larguísimas fermentadas, cocidas – por supuesto – en el horno de leña calentado y “aromatizado” con una mezcla de cuatro tipos de madera ((haya, carpe, roble y fresno).
La de Fabrizio Pasinelli es una pasión auténtica. De hecho, empezó a trabajar como “pizzaiolo” hace veinte años, prefiriendo la pizza a su carrera profesional en otro sector. Primero empezó a trabajar junto con otros “pizzaiolo” locales, luego comenzó a tomar parte en seminarios y clases de elaboración de pizza, y por fin frecuentó también la Universidad de la Pizza del Molino Quaglia en Vighizzolo d’Este en provincia de Padua (entretanto, ya había abierto su Pizzería en Cividate).
Gracias a esta última experiencia nacieron las pizzas Petra, nombradas como el tipo de harina integral molida a la piedra con la cual se realizan. Son pizzas más pequeñas, espesas, muy regulares tanto en la forma como en la cocción, condimentadas con materias primas seleccionadas con atención y con combinaciones de sabores muy originales. Excelentes y muy fáciles de digerir, al ser la masa fermentada durante 60 horas.
No es muy fácil alcanzar esta pizzería, situada entre los callejones del casco histórico del pueblo. Tampoco es fácil encontrar un lugar donde aparcar en la plaza frente al local. ¿Por qué? La razón son las pizzas de Fabrizio Pasinelli, dueño de la pizzería con su mujer Mariangela y su hermano Marcello. Estas pizzas se elaboran utilizando harinas de alta calidad después de largas o larguísimas fermentadas, cocidas – por supuesto – en el horno de leña calentado y “aromatizado” con una mezcla de cuatro tipos de madera ((haya, carpe, roble y fresno).
La de Fabrizio Pasinelli es una pasión auténtica. De hecho, empezó a trabajar como “pizzaiolo” hace veinte años, prefiriendo la pizza a su carrera profesional en otro sector. Primero empezó a trabajar junto con otros “pizzaiolo” locales, luego comenzó a tomar parte en seminarios y clases de elaboración de pizza, y por fin frecuentó también la Universidad de la Pizza del Molino Quaglia en Vighizzolo d’Este en provincia de Padua (entretanto, ya había abierto su Pizzería en Cividate).
Gracias a esta última experiencia nacieron las pizzas Petra, nombradas como el tipo de harina integral molida a la piedra con la cual se realizan. Son pizzas más pequeñas, espesas, muy regulares tanto en la forma como en la cocción, condimentadas con materias primas seleccionadas con atención y con combinaciones de sabores muy originales. Excelentes y muy fáciles de digerir, al ser la masa fermentada durante 60 horas.
