7 Ponti

7 Ponti

Descripción

Nada más probarla, cada explicación no sirve más. La “nube de pan”, recién nacida entre las creaciones de Alessio Rovetta, es una pizza tan ligera que casi se levita, incluso gracias a la fermentación tardando de 48 a 72 horas (y a veces más). Un resultado de altísimo nivel, obtenido amasando harina de tipo 2 (casi integral) con un refuerzo de harina tipo 0, agregando también germen de trigo. Alessio la realizó después de mudarse a la nueva sede de su pizzeria 7 Ponti, en Cenate Sopra, en el viejo restaurante Degli Olivi.

La masa destaca por su increíble ligereza (incluso a nivel digestivo) y se añade a las otras masas caracterizando la propuesta de este joven y ya renombrado maestro de la pizza, que decidió dedicarse con pasión y determinación a la búsqueda de la calidad. Así como por muchos otros colegas, fundamental fue la frecuentación de la Universidad de la Pizza, escuela creada por Molino Quaglia en la antigua sede de Vighizzolo d'Este (Padua). Sucesivamente las harinas Petra, joya de la corona de ese molino, han empezado a protagonizar sus masas. Sin embargo, al contrario de lo que pasó a muchos compañeros suyos, Alessio Rovetta supo ir más allá de esas enseñanzas.

Se puede decir que se dedicó por completo a la búsqueda del equilibrio perfecto entre las distintas masas, las fermentaciones, los condimentos, las cocciones. Llevó días estudiando, experimentando, intentando. Así nacieron sus pizzas con masa orgánica de harina Kamut o bien de farro (solamente de farro o Kamut, sin concesiones), la Petra, y ahora – como acabamos de mencionar, esta última fantástica nube de pan.

Cada disco, entero o bien ya cortado en porciones, está condimentado con ingredientes de altísima calidad, de los cuales se indica la proveniencia y el proveedor (por ejemplo, el embutido de cerdo Culatello di Zibello DOP de Antica Corte Pallavicina; la mozzarella llega directamente de Artelat en Alberobello; el queso stracchino lo produce Ivan Trionfini en Dossena…). Su atención meticulosa a los detalles le hizo comprar dos tipos de horno: uno en material refractario funciona con leña (pero no directa, para evitar los problemas que conlleva este sistema), mientras que el otro es eléctrico. Claro, porque poner a riesgo el resultado utilizando un tipo de cocción no óptima, debida aunque sólo a pocos grados de temperatura, sería una lástima. Un error que Alessio Rovetta, con su licenciatura en Arte de la Pizza, no se arriesga a cometer.


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Nada más probarla, cada explicación no sirve más. La “nube de pan”, recién nacida entre las creaciones de Alessio Rovetta, es una pizza tan ligera que casi se levita, incluso gracias a la fermentación tardando de 48 a 72 horas (y a veces más). Un resultado de altísimo nivel, obtenido amasando harina de tipo 2 (casi integral) con un refuerzo de harina tipo 0, agregando también germen de trigo. Alessio la realizó después de mudarse a la nueva sede de su pizzeria 7 Ponti, en Cenate Sopra, en el viejo restaurante Degli Olivi.

La masa destaca por su increíble ligereza (incluso a nivel digestivo) y se añade a las otras masas caracterizando la propuesta de este joven y ya renombrado maestro de la pizza, que decidió dedicarse con pasión y determinación a la búsqueda de la calidad. Así como por muchos otros colegas, fundamental fue la frecuentación de la Universidad de la Pizza, escuela creada por Molino Quaglia en la antigua sede de Vighizzolo d'Este (Padua). Sucesivamente las harinas Petra, joya de la corona de ese molino, han empezado a protagonizar sus masas. Sin embargo, al contrario de lo que pasó a muchos compañeros suyos, Alessio Rovetta supo ir más allá de esas enseñanzas.

Se puede decir que se dedicó por completo a la búsqueda del equilibrio perfecto entre las distintas masas, las fermentaciones, los condimentos, las cocciones. Llevó días estudiando, experimentando, intentando. Así nacieron sus pizzas con masa orgánica de harina Kamut o bien de farro (solamente de farro o Kamut, sin concesiones), la Petra, y ahora – como acabamos de mencionar, esta última fantástica nube de pan.

Cada disco, entero o bien ya cortado en porciones, está condimentado con ingredientes de altísima calidad, de los cuales se indica la proveniencia y el proveedor (por ejemplo, el embutido de cerdo Culatello di Zibello DOP de Antica Corte Pallavicina; la mozzarella llega directamente de Artelat en Alberobello; el queso stracchino lo produce Ivan Trionfini en Dossena…). Su atención meticulosa a los detalles le hizo comprar dos tipos de horno: uno en material refractario funciona con leña (pero no directa, para evitar los problemas que conlleva este sistema), mientras que el otro es eléctrico. Claro, porque poner a riesgo el resultado utilizando un tipo de cocción no óptima, debida aunque sólo a pocos grados de temperatura, sería una lástima. Un error que Alessio Rovetta, con su licenciatura en Arte de la Pizza, no se arriesga a cometer.