Si vas a visitar Cornello dei Tasso, en la Municipalidad de Camerata Cornello, será como hacer un viaje a la Edad Media. Este burgo, de hecho – considerado como uno de los más hermosos de Italia – se hala en un promontorio rocoso con vista al rio Brembo. Hay solamente dos maneras para alcanzarlo: andando o bien tomando los caminos de herraduras, o sea los antiguos caminos de tierra sin asfaltar. Sin embargo, el aislamiento centenario de esta aldea representó también su mayor fortuna, porque hizo que se conservara intacta su antigua estructura urbanística.
Hay mucho más para descubrir en Cornello: en el Museo de los Tasso y de la Historia del servicio de correos vas a encontrar muchas muestras relacionadas con la actividad de la noble y antigua familia Tasso, procedente del burgo, la cual desempeñó un papel fundamental en el ámbito de las comunicaciones a nivel europeo, inventando el servicio de correos y el taxi. No te pierdas el famoso Penny Black, ¡el primer sello del mundo!
Como se acaba de mencionar, el taxi es una evolución del servicio de correos europeo nacido gracias a la iniciativa de la familia Tasso que, con su actividad puntual y eficiente, logró conquistar la confianza de los monarcas. De esta manera recibió muchas otras comisiones, incluso el transporte de los ingresos fiscales. Los Tasso utilizaron carrozas donde, de vez en cuando, también unos pasajeros solían viajar. Según algunos estudiosos, así es como nace el embrión del servicio de "taxi", que tomaría el nombre de la familia "tassì"
Las muestras guardadas en el Archivo de Estado de Bérgamo y en la Parroquia de Camerata Cornello demuestran que la familia Tasso procedía del aldea medieval de Cornello: su antecesor fue Omodeo, ya mencionado en 1251.
Sus descendientes fueron muy activos: a lo largo de los siguientes siglos, unos de ellos hasta fundaron y manejaron la Compañía de Porteadores de la Serenísima, gestionando las comunicaciones en las líneas Venecia-Milán y Venecia-Roma; otros organizaron los Correos Pontificios, otros en cambio se adjudicaron la contrata para los correos del Imperio Austro-húngaro y fueron nombrados maestros generales de los Correos Imperiales. Durante el siglo XVII, la rama alemán de la familia – conocida como Thurn und Taxis – obtuvo el título principesco.
Hoy en día Cornello dei Tasso se halla en un lugar aislado, en el viejo trazado de la “Via Mercatorum”, pero no fue siempre así. Esta calle, que solía llevar a Valtellina, fomentó los negocios durante cierto tiempo, convirtiendo Cornello en la sede del mercado más importante del Valle. Sin embargo, al construirse la ferrovía de la via Priula (a finales del siglo XVI), el burgo fue aislado de los mayores tráficos.
El entramado urbano de Cornello se caracteriza por el solapamiento de cuatro distintos planes. Los primeros dos niveles están formados por estructuras de defensa horizontales y por una calle porticada dominada por arcos de piedra. El tercer nivel, más abierto, es caracterizado por las viviendas, entre las cuales destaca el palacio de la familia Tasso, apartado de las otras casas y situado en un espolón en el lado meridional del burgo, con papel defensivo mirando hacia el valle. En el cuarto nivel se encuentra la iglesia dedicada a los Santos Cornelio y Cipriano, en la que destaca un campanario románico, muy raro en Valle Brembana. En las paredes internas del edificio puedes admirar un ciclo de frescos muy complejo, tanto en los temas como en los estilos; se supone que, entre los pintores, hubieron también los Baschenis de Averara. Finalmente, sobre el marco del retablo con la Crucifixión de 1635, puede admirarse el blasón de la familia Tasso, con la corneta de posta y el tejón.
Si acaso oyes a un bergamasco decir “Faccio come Pianetti”, o sea “Voy a hacer como Pianetti”, ¡es mejor que te huyas! De hecho, está hablando de un acontecimiento muy sangriento que tuvo lugar en Camerata Cornello, cuando Simone Pianetti mató a siete personas y logró evitar la captura. Procedente de la pequeña contrada de Lavaggi, anejo de Camerata Cornello, emigró a Nueva York probando fortuna. Al volver al Valle Brembana, debido a unas murmuraciones del pueblo, se hizo muy pobre y empezó a planear su venganza contra los que provocaron su situación. El 13 de julio de 1914 mató, en este orden: Domenico Morali, medico local de Camerata Cornello y San Giovanni Bianco, el secretario comunal Abramo Giudici y su hija Valeria, el zapatero Giovanni Ghilardi, el cura don Camillo Filippi, el alguacil del ayuntamiento Giovanni Giupponi y Caterina Milesi (con la cual tenía un contencioso). Después de la matanza huyó por las montañas. Entretanto, la gente empezó a considerarlo como una especie de Robin Hood y un liberador contra las autoridades (alcalde, doctor etcétera); su clandestinidad en el valle Brembana superior fue posible incluso gracias a la complicidad de carboneros y pastores. Las informaciones sobre su suerte son muy inciertas: hay quien piensa que vivió en los montes durante muchos años, o bien quien cree que falleció justo después de encontrar a su hijo, y también quien dice que emigró a América. Lo cierto es que su figura sigue siendo objeto de leyendas, anécdotas, cuentos populares, además de protagonizar unos libros recientes y hasta ciertas canciones de grupos bergamascos, como los Folkstone y los Cucine SCS.
Si vas a visitar Cornello dei Tasso, en la Municipalidad de Camerata Cornello, será como hacer un viaje a la Edad Media. Este burgo, de hecho – considerado como uno de los más hermosos de Italia – se hala en un promontorio rocoso con vista al rio Brembo. Hay solamente dos maneras para alcanzarlo: andando o bien tomando los caminos de herraduras, o sea los antiguos caminos de tierra sin asfaltar. Sin embargo, el aislamiento centenario de esta aldea representó también su mayor fortuna, porque hizo que se conservara intacta su antigua estructura urbanística.
Hay mucho más para descubrir en Cornello: en el Museo de los Tasso y de la Historia del servicio de correos vas a encontrar muchas muestras relacionadas con la actividad de la noble y antigua familia Tasso, procedente del burgo, la cual desempeñó un papel fundamental en el ámbito de las comunicaciones a nivel europeo, inventando el servicio de correos y el taxi. No te pierdas el famoso Penny Black, ¡el primer sello del mundo!
Como se acaba de mencionar, el taxi es una evolución del servicio de correos europeo nacido gracias a la iniciativa de la familia Tasso que, con su actividad puntual y eficiente, logró conquistar la confianza de los monarcas. De esta manera recibió muchas otras comisiones, incluso el transporte de los ingresos fiscales. Los Tasso utilizaron carrozas donde, de vez en cuando, también unos pasajeros solían viajar. Según algunos estudiosos, así es como nace el embrión del servicio de "taxi", que tomaría el nombre de la familia "tassì"
Las muestras guardadas en el Archivo de Estado de Bérgamo y en la Parroquia de Camerata Cornello demuestran que la familia Tasso procedía del aldea medieval de Cornello: su antecesor fue Omodeo, ya mencionado en 1251.
Sus descendientes fueron muy activos: a lo largo de los siguientes siglos, unos de ellos hasta fundaron y manejaron la Compañía de Porteadores de la Serenísima, gestionando las comunicaciones en las líneas Venecia-Milán y Venecia-Roma; otros organizaron los Correos Pontificios, otros en cambio se adjudicaron la contrata para los correos del Imperio Austro-húngaro y fueron nombrados maestros generales de los Correos Imperiales. Durante el siglo XVII, la rama alemán de la familia – conocida como Thurn und Taxis – obtuvo el título principesco.
Hoy en día Cornello dei Tasso se halla en un lugar aislado, en el viejo trazado de la “Via Mercatorum”, pero no fue siempre así. Esta calle, que solía llevar a Valtellina, fomentó los negocios durante cierto tiempo, convirtiendo Cornello en la sede del mercado más importante del Valle. Sin embargo, al construirse la ferrovía de la via Priula (a finales del siglo XVI), el burgo fue aislado de los mayores tráficos.
El entramado urbano de Cornello se caracteriza por el solapamiento de cuatro distintos planes. Los primeros dos niveles están formados por estructuras de defensa horizontales y por una calle porticada dominada por arcos de piedra. El tercer nivel, más abierto, es caracterizado por las viviendas, entre las cuales destaca el palacio de la familia Tasso, apartado de las otras casas y situado en un espolón en el lado meridional del burgo, con papel defensivo mirando hacia el valle. En el cuarto nivel se encuentra la iglesia dedicada a los Santos Cornelio y Cipriano, en la que destaca un campanario románico, muy raro en Valle Brembana. En las paredes internas del edificio puedes admirar un ciclo de frescos muy complejo, tanto en los temas como en los estilos; se supone que, entre los pintores, hubieron también los Baschenis de Averara. Finalmente, sobre el marco del retablo con la Crucifixión de 1635, puede admirarse el blasón de la familia Tasso, con la corneta de posta y el tejón.
Si acaso oyes a un bergamasco decir “Faccio come Pianetti”, o sea “Voy a hacer como Pianetti”, ¡es mejor que te huyas! De hecho, está hablando de un acontecimiento muy sangriento que tuvo lugar en Camerata Cornello, cuando Simone Pianetti mató a siete personas y logró evitar la captura. Procedente de la pequeña contrada de Lavaggi, anejo de Camerata Cornello, emigró a Nueva York probando fortuna. Al volver al Valle Brembana, debido a unas murmuraciones del pueblo, se hizo muy pobre y empezó a planear su venganza contra los que provocaron su situación. El 13 de julio de 1914 mató, en este orden: Domenico Morali, medico local de Camerata Cornello y San Giovanni Bianco, el secretario comunal Abramo Giudici y su hija Valeria, el zapatero Giovanni Ghilardi, el cura don Camillo Filippi, el alguacil del ayuntamiento Giovanni Giupponi y Caterina Milesi (con la cual tenía un contencioso). Después de la matanza huyó por las montañas. Entretanto, la gente empezó a considerarlo como una especie de Robin Hood y un liberador contra las autoridades (alcalde, doctor etcétera); su clandestinidad en el valle Brembana superior fue posible incluso gracias a la complicidad de carboneros y pastores. Las informaciones sobre su suerte son muy inciertas: hay quien piensa que vivió en los montes durante muchos años, o bien quien cree que falleció justo después de encontrar a su hijo, y también quien dice que emigró a América. Lo cierto es que su figura sigue siendo objeto de leyendas, anécdotas, cuentos populares, además de protagonizar unos libros recientes y hasta ciertas canciones de grupos bergamascos, como los Folkstone y los Cucine SCS.
