Situado en el pueblo de Casnico, en el Monte dell’Erbia, el santuario simboliza la devoción hacia la Virgen de este territorio.
Muchas leyendas envuelven el origen de este santuario. Según una de ellas, había una imagen muy venerada de la Virgen del Belén, pintada en la pared en la granja de un campesino. Muchos peregrinos iban a venerar esta imagen, aplastando la hierba de los campos alrededor. Una noche el campesino, enojado por este motivo, desfiguró la imagen de la virgen, que - sin embargo - volvió a aparecer.
Entre finales del siglo XVIII y el comienzo del siglo XIX se realizó una pequeña iglesia, consagrada en 1813. En el santuario se puso la pared de la granja con la imagen sacra.
El decorado es barroco, el plano de la iglesia es una cruz latina y el edificio cuenta con muchas obras de arte. En una vitrina de cristal se conserva la última túnica de clérigo llevada por el Santo Papa Juan Pablo II.
Situado en el pueblo de Casnico, en el Monte dell’Erbia, el santuario simboliza la devoción hacia la Virgen de este territorio.
Muchas leyendas envuelven el origen de este santuario. Según una de ellas, había una imagen muy venerada de la Virgen del Belén, pintada en la pared en la granja de un campesino. Muchos peregrinos iban a venerar esta imagen, aplastando la hierba de los campos alrededor. Una noche el campesino, enojado por este motivo, desfiguró la imagen de la virgen, que - sin embargo - volvió a aparecer.
Entre finales del siglo XVIII y el comienzo del siglo XIX se realizó una pequeña iglesia, consagrada en 1813. En el santuario se puso la pared de la granja con la imagen sacra.
El decorado es barroco, el plano de la iglesia es una cruz latina y el edificio cuenta con muchas obras de arte. En una vitrina de cristal se conserva la última túnica de clérigo llevada por el Santo Papa Juan Pablo II.
