Cuando se habla de “polenta y aves” siempre se piensa en un plato típico bergamasco: sin embargo, ¡existe también una versión dulce! Este postre nació en 1910 gracias al fantasioso pastelero Alessio Amadeo y a su mujer y es una verdadera obra de arte: parece a una simple polenta de maíz, pero esconde un corazón blando y dulce. Capas de bizcocho esponjoso se alternan con un relleno de chocolate, avellanas y licores, cubiertas por pasta de mazapán amarilla decorada con pequeños aves de pasta de almendras aromatizadas con chocolate.
Hermoso y delicioso, este postre se convirtió en el patrimonio común de los pasteleros bergamascos.
Cuando se habla de “polenta y aves” siempre se piensa en un plato típico bergamasco: sin embargo, ¡existe también una versión dulce! Este postre nació en 1910 gracias al fantasioso pastelero Alessio Amadeo y a su mujer y es una verdadera obra de arte: parece a una simple polenta de maíz, pero esconde un corazón blando y dulce. Capas de bizcocho esponjoso se alternan con un relleno de chocolate, avellanas y licores, cubiertas por pasta de mazapán amarilla decorada con pequeños aves de pasta de almendras aromatizadas con chocolate.
Hermoso y delicioso, este postre se convirtió en el patrimonio común de los pasteleros bergamascos.
Terre del Colleoni D.O.C. Moscatel amarillo de pasas