Bergamo, la maravilla a un paso de la EXPO.

Muchísimos son en cambio los testimonios que nos han llegado sobre el condotiero Bartolomeo Colleoni, que fue también comandante de los ejércitos de Venecia.

En la llanura bergamasca se elevan el castillo donde nació, en Solza, y el de Malpaga, que él transformó primero en potente baluarte para controlar los lindes del Estado de Milán, a lo largo del río Adda, y posteriormente en magnífica residencia una vez abandonadas las armas.

Sin embargo es en Bérgamo, en el corazón de la antigua ciudad sobre la colina, donde se encuentra la tumba, más conocida como Cappella Colleoni, en la que mandó que se le sepultara, junto a su hija Medea. La Capilla es uno de los testimonios más famosos y célebres del Renacimiento lombardo.

No muy lejos, a lo largo de una antigua calle llamada Corsarola, ahora dedicada a Bartolomeo Colleoni, se encuentra la casa que fue la mansión del comandante.